Entrada aleatoria

En su época de esplendor, los Pet Shop Boys eran los Interpol de los ochenta, que se disfrazaban para cantar canciones pop muy raras sobre la lujuria y la soledad en la gran ciudad. Ahora son poco profesionales y no se les rinde culto retro a la manera de Depeche Mode, New Order o The Cure, pero puedes escuchar la razón: estos chicos son demasiado tristes.